La imagen de la Virgen del Cisne y el inmenso higuerón fueron consuelo en el agotamiento. Los perros que el día anterior nos persiguieron ladrando, esta vez, demasiado acalorados, no se molestaron en levantarse. La vista del río Bombuscara en el km 19 fue una fresca invitación que aceptamos al terminar la ruta.
Los 14 participantes nos prometimos unos a otros seguir entrenando y si todo se da, volver a participar en el Reto 21x24. Pero lo que sí vamos a cumplir con empeño es proteger el terreno de nuestra propiedad, de 982.000 hectáreas, ubicado entre las provincias Orellana y Pastaza, llamado Yasuní.
¿Quién más puede cuidar si no es el dueño?
CONTINUA...
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